Plataforma ciudadana de comunes urbanos.

En el año 2011 el país se encuentra en situación de crisis, la vivienda ha tenido una sobreproducción que excede las necesidades de la población, la planificación urbana está desordenada, y el consumo abusivo del territorio ha provocado un crecimiento de las ciudades en forma de mancha de aceite sin control en el modelo de crecimiento.
El sistema de desarrollo especulativo aplicado a las metrópolis en los últimos diez años ha fracasado por su insostenibilidad urbana, económica y ambiental, y detrás de la oleada de construcción que ha afectado al país entero quedan, como después de un huracán, las ruinas de un sistema de crecimiento descontrolado, esqueletos de edificios inacabados y vacíos difusos en toda la ciudad.

Los huecos que se han generado con la retirada de empresas y administraciones de la producción urbanística no son sólo materiales, son en muchos casos vacíos de poder que se están confirmando como un territorio de reconquista por parte de la ciudadanía. A través de estructuras organizadas o informales, numerosos grupos vecinales están siendo los protagonistas de una reapropiación y puesta en uso de espacios residuales y abandonados en muchas ciudades de España. Se están desarrollando modelos de participación directa más virtuosos, que pueden constituir un paso, no sólo de superación de la democracia representativa, sino también de la democracia participativa hacia una idea de implicación más directa de la ciudadanía.

Estos dos fenómenos que se están desarrollando de manera aparentemente desligada, manifiestan la definitiva caída del mito del sector privado como agente privilegiado en la producción de ciudad y la urgente necesidad de generar una red social urbana que desde la reutilización del vacío proponga nuevos modelos más justos, sostenibles y solidarios.